28 febrero 2006

SUMINISTRO RESTRINGIDO

SUMINISTRO RESTRINGIDO

El susodicho puede ser muy buen odontólogo, hasta dicen algunos de sus pacientes que tiene manos de ángel quesque porque más tardan ellos en sudar del miedo que él en sacarles las muelas sin que les duela, también puede ser el ganador de los campeonatos de sus mentadas palomas mensajeras, hasta es bueno para poner el café en las mañanas, pero jamás de los jamases será bueno para pagar las cuentas a tiempo.

Cuando éramos novios no le gustaba colgarse en el teléfono diciéndome cosas bonitas, el muy ingrato siempre dijo que el teléfono era para acortar distancias, no para alargar conversaciones. De ahí yo creo que le viene el trauma al pobre que segurito cuando era chiquito le tenían prohibido hablar por teléfono. Tanto que ahora le encanta que le hablen las señoritas encargadas para cobrarle las cosas. ¡Pobre hombre! Con tal de que alguien le hable es capaz de todo.


Pero esta vez fue el colmo. Nos acaban de venir a plantar en la toma de agua un letrero de “Suministro Restringido” de un tono anaranjado vemeafuerzas ¡qué horror! Viene todo pegado y adentro –ya le rompí un cachito- un cilindrito dorado que segurito se ha de llamar “yatefregasteconunchorrito”




Yo sé que el más feliz de ver esto va a ser mi querido hooligan, casi casi lo estoy escuchando decir que para no causarnos molestias mejor no se baña el condenado escuincle que siempre está buscando cualquier pretexto para quedarse cochino. Pero a mi me estaba dando el tramafat, así que para pronto tomé el teléfono y engendrada en pantera le llamé al consultorio al susodicho para avisarle.

-¡Pide un aumento! – le grité. Pobre, él me contestó que sí, pero ni siquiera se acordó que no trabaja para nadie.

Por eso ya implementé el plan de acción B:



O lo que es lo mismo: "Yatefregasteconpuraaguita".

Espero en Dios que esto sirva porque me da mucha vergüenza con los vecinos.
¡Ya no hay justicia en el mundo de veras! Al menos hubieran puesto un letrerito en color discreto.

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27 febrero 2006

PARAÍSO PARA UNA SUEGRA

PARAÍSO PARA UNA SUEGRA



El sábado que ya estaba todo oscuro y apenas caí en la cuenta de que mi querido hooligan se había quedado en la calle jugando con la vecinita, una niña que tendrá unos 9 años y que diario viene a tocar el timbre a las 4:10 como de tarea. Hasta le hacemos burla al hooligan con que lo viene a buscar su admiradora y el pobre se enoja y luego se pone todo colorado. También hemos empezado a hacer quinielas, “$5 pesos a que hoy toca a las 4:20”, “$10 a que a las 4:15”, hasta la muy lista de Lady Pubertiana con tal de llevarse el dinero dijo “20 pesos a que toca a las cuatro con seis segundos” y nada más vemos que se acerca la hora y en la casa se hace un silencio de ultratumba, nadie habla, nadie opina, como si se nos hubiera muerto alguien y el susodicho apaga la televisión mientras nos quedamos todos entrecerrando los ojos muy al pendiente del reloj hasta que se escuche el “Ding Dong” y empiezan todos a gritar al mismo tiempo, y salen con que yo me lo gané, que no que fue él y así.

Lo mismo le digo a mi querido hooligan que tiene permiso hasta las 7 para estar de romance, y si no le pasa como a la Cenicienta y la patineta se le vuelve calabaza y yo me le vuelvo bruja, está advertido. Pero el escuincle no sé qué le pasó que por más que le hacía señas no me hacía caso. Entonces voy y me le planto atrás sin que se diera cuenta y le digo igual como cuando entrenábamos al perro que teníamos: “Adentro” con la diferencia que el perro a la primera obedecía y este niño ni a periodicazos entiende.

-¿Le das permiso de faltar el Lunes a la escuela porque yo no tengo clases y me voy a quedar aburrida? – me preguntaba la niña esta con los ojos como de canica brillooosos brilloooosos, pero la maldita de mí le dije que NO.

De pronto la niña se tira al suelo y me abraza la pierna diciendo “Anda, anda, porfis porfiiiiis, dí que sí” y yo seguía contestándole que no y ella más se me apretujaba la pierna, pobre escuincla, parecía perrito en pleno colofox.

Y yo para pronto le grité al susodicho para que viniera corriendo con la cámara a tomarme fotos porque éste sí que es el sueño de toda suegra: Tener a la nuera a los pies suplicando y estarán ustedes de acuerdo que en estos casos tiene que quedar alguna constancia para la posteridad.



24 febrero 2006

EL OJO CLÍNICO DE LA FAMILIA

EL OJO CLÍNICO DE LA FAMILIA


Ayer vinieron a tomarse el café un montón de vecinas que apenas conozco porque un Comandante de la policía nos dio una plática sobre la delincuencia y cómo prevenir esas cosas.

Pobrecito, con el calorón que hacía y viene con su traje negro pegaaado pegaaaado y todo almidonado, los botones dorados, sus insignias al pecho y el bigote entre que va derecho y no igualito al margen que le hace mi querido hooligan a sus cuadernos, estoy segura que este hombre desde chiquito ya traía la vocación de policía como de esos que nada más ven nublado el cielo y empiezan con que “Ay mamá me estoy mojando”.

El susodicho me hizo una seña para despedirse porque ya se iba al consultorio, pero antes de que pudiera decirme algo fui y le pedí consejo -¿Qué se le ofrece a un comandante de comer? – le pregunto a él que a veces tiene buen tino.

-Ese es puñal- dice mirándolo de lejos, -Dale galletitas de esas con chispas de chocolate-

-Asssshhhh contigo no se puede- le dije y mejor me fui derechito con la charola de galletitas a ofrecerle al comandante mientras lo iba viendo cómo paraba el dedo chiquito antes de cada mordida y cómo se limpiaba las comisuras de la boca con la puntita de la servilleta.

-¿Y qué, la g-ü-e-r-a o-x-i-g-e-n-a-d-a e-s-a pertenece al género? – le digo justo cuando lo veo muy campante revisando de pe a pa a una de las vecinas, casi casi que hasta era capaz de adivinar si traía wonderbrá con la vista de rayos X que le pasó el degenerado este.

Luego mi mamá se acerca a escuchar la plática del comandante y después de un rato me dice al oído, "Oye mijita, ¿Es jotito verdad?"

¡Qué cosa con esta familia! Yo no me había dado cuenta que de un vistazo se pueden adivinar la sexualidad de la gente ¡qué horror!

Pero bueno, lo que importa es que ya tengo mi placa de VECINO VIGILANTE lo que quiere decir que tengo autorización para estar enredada en las cortinas viendo a qué horas y con quién llegan todos los vecinos porque ahora por órdenes de la ley tengo el encargo de estar de chismosa y sépanse que a la ley hay que respetarla. ¡Sí señor!

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22 febrero 2006

EL POST CUMPLEAÑOS DEL HOOLIGAN

EL POST CUMPLEAÑOS DEL HOOLIGAN


Todo empezó el día del cumpleaños de mi querido hooligan, cuando yo creí que mis dotes de mujer pulpo que puede hacer ocho cosas a la vez seguían vigentes. Mi querido hooligan siempre hace lo mismo, invita niños y en cuanto llegan se despide para irse a andar en bicicleta. ¡Qué síndrome el suyo! A lo mejor eso es una enfermedad que le heredó la familia de su papá porque en mi familia todos son normales. Espero que en su boda ni por equivocación se le ocurra que cuando vea que llegan los invitados diga “Voy por un cigarro” y jamás vuelva como en las telenovelas ¡qué horror!

Estaba yo entre que dame cinco minutos para acompañarte a la calle con todo el escuinclerío y que llegó la vecina que si la ayudaba a hacer una circular en la computadora porque es de las que piensa que Control-Alt-Supreme es una posición del Kamasutra y a mi me da lástima la pobre. Qué mala suerte que no hay olimpiadas de mecanografía porque ayer me hubiera llevado la medalla de oro, le resumí su discurso de media hora a tres renglones y se lo escribí en lo que ella alzó el brazo para quitarse los lentes porque ya me urgía salir de vigía. Y es que el hooligan sabe perfectamente que cuando le digo: E-S-P-É-R-A-M-E pelándole el ojo y apretando los dientes quiere decir que no lo agarro a nalgadas nada más porque hay visitas y el muy desgraciado hasta lo goza.
Estoy segura de que este niño de grande va a ser mesero de restaurante de mala muerte, porque jamás me hace caso en nada de lo que le digo.

En cuanto la vecina dijo “Está bien así” para pronto lo imprimí y le dije que ya no había otra hoja para que no se le ocurriera pedir algo más. Le grité a toda la tropa de escuincles que a estas alturas ya eran 7 que cargaran con bicicleta, patines o lo que tuvieran a la mano y nos salimos.


Ya estando afuera, me dí cuenta que me faltaba un niño que para colmo era el más chiquito. Casi igualito que en la película de Home Alone pegué un grito de retirada y me lancé a la casa a buscarlo. ¡Qué cosa! Jamás se me olvida el suéter, jamás se me olvida decirles a todos que hagan pipí, jamás se me olvidan las llaves pero sí se me olvida un niño ¡qué horror!


Ahhh como quisiera a veces que el hooligan fuera como Pedro el de Heidi y que lo único que le importara en la vida fuera perseguir a un chivito.



20 febrero 2006

CÓMO HACER UN FRIJOL CHARRO

CÓMO HACER UN FRIJOL CHARRO

Hace ocho años a esta hora justo estaba atorada en el tráfico a punto de parir a mi querido hooligan que ahí anda roncando mientras yo les escribo esto, porque su madre que los friega de un hilo todo el año con que "apúrense van a llegar tarde, arreglen las mochilas, córranle que ya es hora", el día de su cumpleaños voy al pie de su cama, les doy un beso y les digo en tono quedo “Feliz Cumpleaños” y antes de que empiecen a retorcerse como todos los días cuando les grito que ya es hora, les doy la buena noticia de que por motivo de su cumpleaños se suspenden las actividades para el festejado y me contestan casi como boxeador en pleno knock out “Grashiashhh” entre dientes, mientras los dejo dormir como lirones a los pobres. Aunque todavía no descubro si lo que más disfrutan es quedarse dormidos un rato más o que el otro, el no festejado, se tenga que ir muerto del coraje a la escuela.

Justo me estaba acordando que cuando quise embarazarme de mi querido hooligansito le dije al susodicho que ni por equivocación le pasaba por la cabeza tener otro hijo, que si no nos aventábamos por el segundo escuincle, íbamos a parecer abuelos en lugar de papás y para pronto el susodicho sacó su tarro de frijoleiros del clóset y lo puso en su buró.

Luego estaba necio el hombre con que quería que fuera niño, "Este tiene que ser frijol charro" dijo, y estuvo dispuesto a hacer todo lo necesario para que así fuera, esa fue la única vez que ha querido seguir una dieta y que en su vida ha seguido un horario. Estoy segura que si le hubieran dicho que tenía que colgarse del ventilador y dar tres vueltas lo hubiera hecho tal cual con tal de que el tino no le fuera a fallar.

En cuanto el Doctor nos hizo un ultrasonido no tuvo que decirnos el sexo, para pronto se vió en primera plana que el bebé tenía 3 patitas y al susodicho se le infló el pecho mucho más que cuando su equipo de los Pumas gana algún campeonato. De ahí decidimos cerrar la fábrica definitivamente y abrir Six Flags.

Pero una noche antes, entre el nervio y que el doctor dijo que cenara bien porque no iba a poder comer en muchas horas, soñé que ya pasado todo el show del parto le preguntaba al doctor si no había tenido ningún problema con la clausura de la fabriquita y el doctor se volteaba a verme pelando el ojo diciendo para sus adentros “Iiiiii” de que se le olvidó y yo me desperté con el peor grito de terror que se haya escuchado jamás en esta colonia. Así fue que todavía no salía el sol y yo ya le estaba llamando al doctor para amenazarlo de muerte.

Por eso en esta casa los 20 de Febrero cuando mi querido hooligan apaga las velas del pastel, el susodicho se para atrás y sin que nadie lo vea también sopla un poquito, porque a parte de festejarle los años a su hijo, él festeja que donde puso el ojo, puso el frijoleiro charro.

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17 febrero 2006

LAS TELENOVELAS DE LA VIDA REAL

LAS TELENOVELAS DE LA VIDA REAL



Hace muchos años pasaban de noche una telenovela que nos tenía a todos enganchados, qué les digo, los protagonistas eran Juan Ferrara y Lourdes Munguía, dos artistas que en ese entonces estaban en su mejor época. Llegaba la noche y el susodicho y yo nos plantábamos en la cama a ver la televisión como hipnotizados, casi casi le podía sacar una uña enterrada y ni siquiera gritaba groserías como siempre.

Yo no sé qué pasaba pero en ese entonces todos caían con que me parecía a la tal Lourdes Munguía, me lo decían 2 o 3 veces al día ¡qué cosa! Hasta Polito el jardinero me lo dijo, andaba en chanclas rotas casi descalzo el hombre pero bien que veía telenovelas, hasta el susodicho de vez en vez me decía “Cecilia” el desgraciado que siempre se burló de eso.

Con las ganas que tuve de que el susodicho fuera “Claudio”, un empresario rico y con una voz de lo más sensual queriendo conquistar a Cecilia sin importarle que otras resbalosas anduvieran tras él. Pero este Claudio Susodicho que odia las corbatas jamás me llevó a Nueva York de ida y vuelta, ni le regaló joyas carísimas a ésta pobre Cecilia que a aunque sabía que no tenía ni un avión particular, siempre lo ha querido al desgraciado.

Hubo una parte en que Claudio entraba a la oficina y con solo mirar a Cecilia se derretían los dos, Claudio llevaba las manos a la cintura de Cecilia aventando el portafolio y se les alborotaba la hormona sin importarles que estuvieran en horas de trabajo ¡qué cosa! Ahí justo fue cuando Claudio le dio el primer beso a Cecilia. Para pronto me acordé que mi Claudio Susodicho que solo cuando iba a la escuela cargó un portafolios, un buen día aventó las pinzas con las que saca las muelas y me plantó un beso igual, fue el primero, aunque la verdad yo no sentí nada porque tenía la boca anestesiada. Pobre me preguntó si quería ser su novia y yo nada más dije “Aaaá” de que me tenía con una manguerita para sorber saliva y él luego luego entendió que sí. ¡Ahhh lo que tiene que hacer una por ahorrarse las consultas de veras!

Una parte de la telenovela Claudio y Cecilia se la pasaron separados por las intrigas, y nosotros sufríamos igual que cuando se nos enferma un hijo. Pasaban capítulos y capítulos y todos llorábamos hasta que un buen día Claudio muy decepcionado se iba lejos para no volver y Cecilia corrió en medio de la lluvia, yo jamás hubiera corrido así porque luego ni quien me aguante con el cabello a la afro, y se ve que se abrazan y se van cayendo lento al suelo hasta que desaparecen de la pantalla.

Lo malo de todo es que en esta casa podemos no ver telenovelas en meses y meses pero el final lo vemos de cajón aunque no entendamos ni quien es quien, pero en ésta, que era nuestra telenovela favorita, no alcanzamos a ver que ahí ya reconciliados y a punto de subir al avión de Claudio pusieron la palabra FIN. Y es que aunque jamás hagan tomas de lo que pasa en el suelo cuando salen de cuadro los personajes, el Claudio Susodicho y yo nos completamos el capítulo porque nunca nos ha gustado andar dejando esas cosas a la imaginación ¡faltaba más!

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15 febrero 2006

LOS SECRETOS DE UNA BÁSCULA

LOS SECRETOS DE UNA BÁSCULA



El lunes me tocó cita con Gaby, mi nutrióloga. Además de ser muy buena en lo suyo predica con el ejemplo porque la mujer acaba de tener un bebé y ya está como varita de nardo la condenada y yo que parí hace 7 años todavía no quepo en mis pantalones negros ¡qué horror! Pero tengo mis esperanzas porque si pudo bajarle 30 kilos a mi cuñado que no se comía al perro nada más porque los pelos le causan agruras, todo es posible. Ahora mi cuñado está de lo más flaco que no vieran y a mi me da una envidia de aquellas.

Tengo mi cita cada quince días y como a ella ya le tocó la época de la cibermedicina me manda un menú por e-mail, pero yo me tengo que poner muy lista para poder imprimirlo cuando Lady Pubertiana se levanta de la computadora a hacer pis y es que la escuincla esta que en la casa ni por equivocación levanta un calzón, ahora se la vive plantada en un jueguito que dice que se llama Sims levantando paredes y acomodando recámaras ¡háganme favor!

Las veces que mi voluntad anda por los suelos y no voy a mi cita, Gaby me restriega la conciencia mandándome avisos sin saludos ni posdatas, casi casi después del arroba escribe: “Tercera llamadaaaa, t-e-r-c-e-r-a” y cuando leo el punto final me empiezo a retorcer como lombriz con sal y mejor llamo por teléfono para confirmar mi cita.

Y es que ya le dije al susodicho que a este sube y sube que nos traemos en la báscula le tenemos que poner fin porque parece que estamos en carrera de relevos, yo subo un kilo y él detrás de mi va por el suyo porque el muy envidioso jamás se ha querido quedar atrás en nada, entonces TODOS en esta casa por default se tienen que comer lo que Gaby nos mande y mi querido hooligan se pone de lo más contento. Pobre escuincle que parece lombriz solitaria enredada en el intestino de lo flaco que está y aún así él es feliz de que lo atasque de verduras.

Pero hoy en la casa estamos de luto, la báscula está muerta. No marca ni una rayita más ni una menos. El susodicho ya estaba festejando porque ya se sentía livianito y le acabo de cortar toda su felicidad diciéndole que no se haga ilusiones que lo que pasa es que la báscula está descompuesta y lo peor del caso es que ahora me doy cuenta que visitábamos más a la báscula que lo que visitamos a la familia y nos quedamos como drogadicto sin cocaína ¡qué horror! No podemos saber si con los que nos cenamos ayer con el pretexto del día del amor subimos un alterón de kilos peor que el de la ropa que hay para planchar o se resuelve con una idita al w.c.

Ya iba a tirar la báscula a la basura y nos entró una nostalgia que Dios guarde la hora, y es que ésta máquina nos ha visto sudar de miedo apenas plantábamos un pie encima y nos vió brincar de alegría cuando veíamos rayitas abajo, era más que una confidente. Así que sin decirnos nada decidimos dejarla ahí, afuera del vestidor. De repente veo al susodicho subirse con la esperanza de que ahora sí marque algo, casi casi lo escucho decir “Tú puedes chiquita” y de pronto se baja mirando al suelo y se va. No le digan a nadie pero yo de repente hago lo mismo ¡pobres locos de nosotros!

Ahora no nos queda más que esperarnos otros quince días a volver a pesarme en la báscula ultramoderna de la nutrióloga y que el susodicho se tope con una de esas que les echas monedas y de paso hasta te dicen cuanto mides porque a como veo no creo que ninguno de los dos se atreva a comprar una báscula nueva de esas digitales para que tengamos que terminar tirando nuestro confesionario descompuesto.


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13 febrero 2006

MEDITANDO ANDO

MEDITANDO ANDO


Tengo un amigo que es algo así como mi héroe virtual, se llama Bruno Ruíz y es un escritor excelente. Resulta que Bruno practica sin fallar la meditación, dice que le ha ayudado a mejorar distintos aspectos en su vida. ¡Qué bárbaro! Desde que me va contando sus experiencias con la meditación por el messenger yo por automático me voy desconectando y es por eso que a mi me dieron ganas de querer practicarla.

Para pronto le escribí un mail para saber cómo empezar y muy atento me mandó algunos pasos. Yo no entiendo de verdad cómo le hace, créanme, yo le pregunto al susodicho cuando está callado en qué piensa y él me contesta “Nada” y luego Bruno me dice que me relaje y que ponga la mente en blanco ¡Ayyyy Dios qué miedo me dan estos hombres de veras!

Y es que yo voy me quito los zapatos y me pongo ropa floja, me siento y empiezo con la respiración y a relajar los músculos, a que todo fluya, a ir dentro de mí misma según dijo Bruno.


"Oooommmmm, Oooommmmmm" empiezo a decir en un tono quedo porque cuando meditan en las películas siempre salen diciendo así y cruzando las piernas con una facilidad que Dios guarde la hora, el día que logre que las piernas se me queden estáticas en esa posición por al menos 2 minutos seguidos le grito al susodicho para que rapidito venga a tomar una foto para que los demás me lo crean.

"Ommmmmm" repito mientras respiro y antes de que termine la última eme me acuerdo que no he pagado el maldito teléfono y hoy es el último día. ¡Dios de mi vida! Para tomar otra vez inspiración cuesta, pero no importa, estoy en el renglón y con la motivación igualita a las veces que me dicen mis cuñadas “¿Adelgazaste?”, y entonces vuelvo “Ommmmmm- Ommmmmmm” ¡Qué barbaridad no puedo creer tanto silencio! Y entre que abro un ojo y lo vuelvo a cerrar noto que en el rincón del mueble hay una telaraña colgando y me viene a la mente la desgraciada de la Sofiringa que siempre sacude por donde la suegra ve, y así continúo respirando.

Bueno qué les digo, a mi con estas cosas de la meditación en lugar de dejarme la mente en blanco me la deja llena de pendientes de los que ya no me acordaba, con decirles que en una respiración me vino a la mente como en un flashazo de esos que pasan en las telenovelas cuando hablan como en recuerdo sin mover la boca, que el otro día que llovió muy fuerte dejé cerrada la ventana de la casa de junto que está abandonada, por donde un gato siamés se metía todos los días, ¡Ay con razón no lo he visto al pobre! Todavía fui y regañé al hooligan por estarle poniendo trampas al mentado gato para que se cayera de la barda. ¡Ayyy qué horror, si la matona soy yo! Ya ni me atrevo a abrir la ventana de nuevo porque segurito que eso huele a morgue de gatos.

Ahora voy andar por el mundo con los músculos muy relajados y el espíritu en calma de tanta meditación pero con la conciencia maullándome en cada descuido.


Yo creo que algo estoy haciendo mal, mejor me voy a releer el mail que me mandó Bruno, capaz que me dijo de las chakras y yo entendí que me ponga las chanclas ¡qué cosa!




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10 febrero 2006

LOS VIERNES NO GANA UNA PARA ESPANTOS

LOS VIERNES NO GANA UNA PARA ESPANTOS

Hoy amanecí con el corazón en la garganta, ¡qué espanto! De esas veces que estás dormido y a la vez no estás porque estás viviendo cosas en los sueños, ahí andaba tomándome el café con un anciano que en mi vida he visto, cuando de repente así igualito como cuando se le iba la aguja al elepé y sonaba grisccchhh se escuchó como un bulto iba cayéndose de algún lado. Como ni en sueños he dejado los buenos modales a un lado, en un segundo le dije al señor del sueño con su permiso y me desperté de sopetón justo cuando escuché a Lady Pubertiana gritando.

Me levanté de la cama como resorte y me fui corriendo a ver qué pasaba. Me encontré a la escuincla esta viendo para abajo de la escalera y ahí entre los escalones con una mano en las mochilas de los niños y la otra en una taza de café, el pobre del susodicho tirado como res ¡qué susto! El pobre hombre jamás ha sido elástico, hasta trabajo le cuesta subir el pie para ponerse el calcetín y ahora estaba como compás a punto de girar 90 grados con una pierna apuntando al norte y la otra al suroeste.


Pálida como una hoja bond me salté todos los escalones de un jalón hasta el descanso, ni la mujer biónica hubiera podido hacer eso y conste que ni siquiera se escuchó ni un chu-chu-chu. Lo ayudé a pararse, hay que reconocer que el susodicho es buen equilibrista porque siendo de los que llenan la taza del café hasta el tope que hasta le tienes que dar un sorbito porque si lo sirves como la gente normal, el hombre dice que son medias tazas, apenas y tiró unas cuantas gotas. Sacrificado este señor que prefiere golpearse todo antes de descompletar el último juego de tazas que nos queda.


Tenía el brazo todo raspado y con un futuro moretón marca ACME y a mi me entró un sentido sobre protector que Dios guarde la hora, un querer abrazarlo fuerte, un querer sobarle el brazo con Vitacilina que ya sé que no es para golpes pero en esta casa se usa para todo, tienes un piquete: Vitacilina, tienes comezón: Vitacilina, tienes mocos: Vitacilina, tienes un marido tirado en la escalera: Vitacilina.

Ya embadurnado todo el brazo del susodicho le recargué la cabeza en el hombro y le tomé la mano.

-Qué susto me pegaste- le digo en tono quedo, ya con la calma y a la vez las prisas de que se aproximan las siete de la mañana y nadie está listo. Nada más de imaginar que en lugar de compás hubiera terminado como transportador se me hacen las piernas de hilacha.

-Mejor no hay que ir a la escuela- escuché que dijo el hooligan que siempre se quiere colgar de cualquier pretexto.

-Si tu ni cuenta te diste cómo fue rebotando escalón por escalón porque estabas como zombi de dormido- le gritaba Lady Pubertiana que es buena para contrapuntear, de seguro no va a ser chef como ella dice porque tiene una pinta de reportera amarillista que no vieran.

Ya pasado el susto y todos listos se subieron al coche. Le dí un beso al susodicho de esos besos con los que adornan la palabra FIN en las telenovelas, que hasta los hijos ya en el coche nos tocaban el claxon y los muy desgraciados nos gritaban “¡Échenles agua!” ¡Ashhhh de veras que nadie aguanta 3 minutos de romanticismo en estos días!

Y me quedé al filo de la puerta diciéndoles adiós con la mano mientras veía como se iba alejando el coche justo cuando pasó frente a la casa un señor de boina y bufanda paseando a un perro de raza eléctrica, volteó y me alzó la ceja en forma de saludo con un gesto bondadoso y bonachón y yo le correspondí el saludo. Mientras iba cerrando la puerta me cayó el veinte de que era idéntico al señor del café de mi sueños. ¡Ayyyyyyyy qué miedo me dio! ¿Qué hace aquí si lo dejé tomando café? ¿Porqué pasear al perro a estas horas de la mañana? ¡Qué horror!

Qué mañanas de susto caray, a este paso ni el wonderbra me va a curar de tanto espanto.

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09 febrero 2006

¡OTRA CADENITA!

¡OTRA CADENITA!

Esta vez fue johanen, perdón digo joanhen, auggggggg nunca puedo escribir bien su nombre ...respiración fiuuu fiuuuuuu ahora sí ahí va: JONAHEN, quesque a él lo invitó LaMaga para que hacer el concepto de tu blog dibujado y me puso la tarea a mí el muy malvado. Y a mí se me ocurrió esto:


Conste que tengo que dejar esta tarea a 5 más para que así se haga como regadero de pólvora estas cadenas que parecieran ser cadenas perpetuas, pero esta vez los dejo libres para que lo haga quien se anime. Pobres de ustedes donde me caiga la maldición de que me regresen a mi suegra por andar rompiendo cadenitas ehhh ¡Pos estos!

Ahhh por cierto que mi amiga LaMaga va a participar en BigBlogger 4 que está por comenzar muy pronto ¡Suerte!



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08 febrero 2006

UN HOOLIGAN CONTRA AGUA

UN HOOLIGAN CONTRA AGUA


Qué suerte que cuando nació Lady Pubertiana no había un notario en el hospital porque yo hubiera ido directito a asentar en un acta con todo y firma de testigos al calce que jamás ni remotamente loca iba a ser capaz de darle una nalgada a mis hijos. Ahora segurito estaría en la cárcel y es que mi querido hooligan tiene días que está en huelga de agua. El muy cochino escuincle no quiere bañarse ni siquiera por $50 pesos que la banca le ofrece. Bueno, hay que reconocer que el escuincle no es materialista, nada más es puerco.

Entonces voy y me le paro en la puerta del baño señalando la regadera y empiezo con mi cuenta regresiva de “Unaaaaaaaaaa” – “Doooooooos” mientras lo veo cómo le empieza a cambiar el color. Pobre niño, nada más porque está como la cuaresma el pobrecito: largo y escaso de carne, que si no pudiera parecer todo un Hulk de tanto que me gruñe el desgraciado escuincle. Todavía se atreve a decirme que ya se bañó ayer ¡háganme favor! Estoy a nada de renunciar y contratar a la Nana de Guanajuato para que lo cuide.

-Ahora si ya me colmaste la paciencia- le grito mientras voy corriendo atrás de él -Ven, que te voy a dar una ehhhhh!-

Y el escuincle se tira al suelo, con un berrinche peor que el de Pepe el Toro cuando gritaba que era inocente.

-No le debes de pegar a tus hijos- me contestó el escuincle este que no entiende nada de estar limpio, pero eso sí, de los derechos humanos se lo sabe todito.

Y me desarma, el muy listo me deja como James Bond cuando lo han acuartelado, alzando las manos, mirando al suelo, pensando que tiene razón porque la violencia no conduce a nada, cuando de pronto levanto la vista y le veo una media sonrisa maliciosa igualita a la que hace su papá cuando gana el control remoto de la televisión y me suelto otra vez a corretearlo.

Debe de estar agradeciéndoles a todos los santos de que su madre no tiene una buena condición física porque donde lo alcance, juro por dios que no le pego, nada más le voy a arrimar la ropa al cuerpo, que eso no ha de venir en ningún manual de derechos humanos.

A este paso seré la única mujer en el mundo que se inscriba a clases de aeróbics nada más para tener un hijo limpio ¡faltaba más!.


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06 febrero 2006

TECNOLOGÍA DE PUNTA ... Y PLUMAS

TECNOLOGÍA DE PUNTA... Y PLUMAS


Estaba yo de lo más relajada porque no tuve que andar arreando niños para la escuela porque nos dieron el día quesque porque hay que hacerle igual que los gringos, sirviéndome mi café y encendiendo la computadora justo cuando lo primero que se me aparece en la pantalla es esto:


Información aquí

¡Dios de mi vida! Hasta el café se me fue por otro lado, ¡qué horror! ahora resulta para colmo de los colmos que a los pajarracos esos les van a dar mochila, celular, cámara y hasta blog. ¿Se dan cuenta? Yo que no me compro bolsas desde que vi que nada más por traer un osito dibujado te cuestan un ojo de la cara y la mitad del otro, que las veces que he cargado con el celular en la bolsa me reclama el susodicho porque me llama ochenta veces las mismas ochenta llamadas perdidas que me salen de aviso, que mi cámara con trabajos toma fotos terrestres mucho menos tomaría fotos aéreas y que tengo un blog para ahorrarle las terapias con el psicólogo al susodicho ¡Válgame Dios! y me salen con que las malditas están peor que los chinos que ya lo tienen todo, incluyendo al marido de una esnif esnif ¿A dónde va a parar el mundo de veras?

Me despido porque cuando una está deprimida tiene que ir de shopping. Voy a ver si de casualidad venden fundas de almohada vacías y a cambiar ese hábito malsano de rellenarlas con plumas de ganso ¡faltaba más! Y de paso hago una parada en la farmacia a comprarme un Valium de doble acción: que me tenga drogada de día y noqueada de noche, mientras espero que llegue el día en que los ojos de científicos y biólogos del mundo digan que hay cierta especie de palomas mensajeras que por alguna causa extraña están perdiendo las plumas.

Nada más les digo que eso de la gripe aviar va a quedar en el olvido.

¡Ay Dios, lo que no hará una por estrenar una bolsa!

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03 febrero 2006

UNA PRESIDENTA SIN NADIE A QUIEN GOBERNAR

UNA PRESIDENTA SIN NADIE A QUIEN GOBERNAR



Lady Pubertiana tiene fiesta hoy viernes, mi querido hooligan también ¿qué se piensan en esta casa? Hasta ganas me dan de tirarme al reposet del susodicho a hacer lo mismo que él: apretar todos los botoncitos del control remoto de la televisión de arriba para abajo y luego de regreso para recorrer todos los canales habidos y por haber, todo eso hace en escasos segundos ¿y saben para qué? Para terminar plantado en el juego de los Pumas contra otros sepadiosquienes. ¡Qué dicha la suya!

Debería ser yo como la Presidenta nueva de Chile, ¡qué elogios ha de recibir la mujer esa! Desde recién levantada con el rímel corrido ya le han de decir su gabinete de mucamas, “Buenos días señora, qué guapa amaneció hoy” y luego en su trayecto al trabajo nadie se ha de atrever a cerrársele en el coche pues ni quien se quiera llevar una mentada de madre presidencial, eso sí ha de doler hasta el alma oíganme.

¿Se dan cuenta? Estando así a quién le puede importar que la Sofiringa de una vaya a lavar la ropa de color junto con la blanca ¿a quién? Ya me veo yo, en lugar de pláticas con las vecinas mientras cuidamos escuincles en la calle, serían juntas y juntas con senadores, cónsules y diputados, ¡Madre mía! ¿Y de qué hablan ellos? ¿Me podrán dar el resumen de la telenovela del guardaespaldas antes de empezar con aquello de la nueva democracia? Y luego medias, ayyyy Dios de mi vida, usar medias y no repetir traje sastre porque ahora en lugar de “ya me lo vieron las criticonas de mis cuñadas”, sería “ya me lo vio media América Latina” ¡qué cosa!

Ya no digo nada, la tarde será larga hoy sin nadie a quien gobernar, así que creo que esta mandataria frustrada hará votos por irse a tomar un capuchino con las amigas, por que esta vez el mundo está cansado de hablar de proyectos políticos y quiere hablar de lo único que se habla con seriedad y compromiso en una tarde de puras mujeres y cafeína: SEXO.

He dicho.



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01 febrero 2006

PARA CUANDO ALCANCES EL TIMBRE...

PARA CUANDO ALCANCES EL TIMBRE...


Yo creo que en alguna caja de cuando nos mudamos a esta casa venía escondido un aparatito filoso tipo cuter especial para cortar cordones umbilicales y es que todo me ha cambiado con mi querido hooligan que antes era peor que mi sombra, a donde me moviera yo, ahí pegadito iba él, pero ahora véanme, ya hasta puedo ir al baño en completa privacidad ¡qué cosa!

Todavía me acuerdo que le dije al susodicho que me quería embarazar antes de cumplir los treintas y el semental este ya tenía planeadas todas las estrategias habidas y por haber para cumplir: que si flor de loto, que escuchando a Sinatra, que comiendo sin sal, que un día saltaba del ropero y el otro no, que tomando cervecita para relajarse ¡bueno una de cosas que no vieran! Jamás en su vida ha sido tan ordenado ni para el trabajo ni para las cuentas, se le olvida todo, pero eso sí, no hubo un día que este hombre dejara de cumplir su obligación para con su descendencia ¡Viejo mañoso, tan sacrificado siempre!

Después que nació el hooligan ya no hallaba cómo regresarlo ¡qué horror! Ojeras y ojeras hasta la fecha, que por más que le he buscado por todos lados a este escuincle, no le he encontrado dónde se apaga. Ya ven que hasta un día le puse un cd de la Trevi al revés, toda la santa noche se escuchó el “Tienes que obedecer, Tienes que obedecer” y ni así que funcionó nada.


Pero ahora lo veo, justo en este mismo momento en el que les escribo esto, deslizándose en su patineta mientras el viento le va pegando en la cara, casi casi todavía me huele a pañal meado y mírenlo, todo un hombrecito que se siente tan independiente que ya no quiere que lo salga a cuidar a la calle. Y ahí anda, dando saltos entre un montón de escuincles de esos que ya tienen acné en la cara y todos diciendo que cómo es posible que tan chiquito y tan … tan…tan…¡Ay Dios mío, qué nostalgias! Y es que nada más díganme una cosa, ¿cómo se deja a un hijo que todavía no se limpia bien la cola? ¿CÓMO?



Yo nada más espero que algún día este niño crezca lo suficiente como para alcanzarle la boca a la novia sin tener que subirse en una sección amarilla, y que sea un hombre trabajador, un hombre importante, un hombre que haga historia, qué digo…simplemente un buen hombre con todas las que eso lleva, aunque para su madre siempre seguirá siendo ese niño de allá afuera que ni brincando alcanza el timbre.

¡Ahhhhhhh lo que no hará una por aumentar las efemérides!

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