Hoy miraba al hooligan de a "refilón minucioso", es algo que solo las madres podemos hacer porque de un vistazo ya le revisas hasta dentro de las orejas a los hijos, y todo en un solo paso sin pestañear.
-Mijo- le digo con un tono tierno antes de que le caiga la tormenta encima -¿Hace cuánto que no te bañas escuincle mugroso ehhh?, Contesta ahorititita mismo- Y el hooligan sabe perfecto que cuando minimizo el “ahorita” es que ya la cosa está grave.
-Pues ayer- me dice muy confiado de que le voy a creer sus mentiras.
-¿Ayeeeeeeeeer? – le pregunto, -¿Pues qué no te fuiste desde tempranitito con tu tía Bety mentirosote?-
-Ahhhh, pus entonces, anteayer- Me dice haciendo recuento mental.
-No gastes tus neuronas escuincle, porque las madres toooodo lo sabemos, toooodo lo vemos, a mi no me puedes engañar- le digo muy convincente y el pobre ya no sabe qué contestar, se me queda mirando sabiendo que su madre, que es mitad bruja, va a adivinar que ya lleva 3 días sin tocar el agua el méndigo escuincle.
-Pero má, no bañarse no es ser sucio- me dice mientras yo levanto las cejas y me empiezo a engendrar en pantera.
-¿Cómo puedes decir eso? ¡Ja! Ahora resulta que los que no se bañan en 3 días son limpios, que, ¿Así te eduqué yo con tanto esmero, para que me resultes un cochino y aparte de todo un mentiroso?- le digo
-Sí ma, los que se bañan usan shampoo ¿no?, los que se bañan usan jabón ¿no?, mi hermana tarda 20 minutos en la regadera y 30 si mete la grabadora al baño ¿no?- comienza a cuestionarme el escuincle este, que a sus 7 años ya se cree que estamos en una mesa redonda debatiendo como los políticos.
Ya iba yo a tomar aire para soltarle mi catálogo de amenazas cuando de repente se para sobre la cama, con su estrategia de huída que le conozco mejor que nadie, porque brinca y en lo que yo me estiro para alcanzarlo él escuincle se aprovecha de que tiene dominada la cama como tumbling y se me escapa entre las piernas. Pero no, esta vez no huyó.
-Mi hermana está secando la tierra ma ¿te das cuenta?, se acaba el tinaco de una bañada y todo para que ni el zacate agarre- me dice y me deja inmóvil mientras continúa diciendo, -Mi papá y tú le están echando shampoo y jabón a las coladeras que van a parar en el desagüe, que van a parar al mar y luego todos los peces nadan entre la espuma, se retuercen boquiabiertos y aletean hasta que se mueren- me dice y yo ya no pude contestarle ni regañarle nada. Me quedé pensando en sus discuplas para estar mugroso y ahora me quedan dos cosas por hacer:
1. O el escuincle este deja de ver el Animal Planet
2. O nos quedamos todos mugrosos hasta que nos pique la cola. Eso sí, seremos muy mugrosos pero muy ecológicos.
¡Válgame el cielo! Ahora resulta que la mugre es la que va a salvar al Amazonas.
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