04 marzo 2005

EL SEÑOR DE LOS ARILLOS


Los más gratos momentos en la vida de una son cuando te casas (eso dicen las malas lenguas) y cuando nacen tus hijos. Me acuerdo que cuando buscaba embarazarme de Lady Pubertiana nos la pasábamos cortando floresitas del campo el susodicho y yo, ya casi sembrábamos un jardín de 100 metros planos.

Pasaban los meses y no pegaba el chicle. Yo con la bandera blanca en señal de rendición opté por que ya no me iba a preocupar y al mes que me tocaba pagar la mensualidad ...NADA.

Hace 13 años las pruebas para los embarazos no eran cosa tan común como ahora que hasta en el super las venden. Decía el papelito que tenía que esperar hora y media y si acaso se veía un círculo oscuro con un arillo era que y si se veía el puro círculo era que el susodicho comenzaría a ser apodado el CANDEREL (por que endulza pero no engorda)

Dejé la pruebita sobre la mesa y me fui a hacer mis cosas. El susodicho estaba contando los segundos igualito que los cuenta cuando sus Pumas están a punto de que les metan un gol en el segundo tiempo y justo fue a asomarse cuando se cumplió la mentada hora y media.

El circulito solo, sin arillo ni nada que le baile alrededor. Nada...un triste círculo oscuro como eclipse lunar.

Ya fue el susodicho a servirse una copita para ahogar sus afrodisíacas penas con un poquito de La Damiana, cuando oyó mis gritos.


- ¡Sube, miraaaaaaaaa... El circulito tiene un arillo! –

Como ya había pasado otra hora creímos que el arillo ya había caído ahí por fuerza de dejar orear aquello por tanto tiempo.


Ahora nuestra incredulidad acaba de cumplir hace unos mesesitos 13 años.

.

.


(((Buen fin de semana !! Ahhhhhh benditos sean los viernes ! )


No hay comentarios.: