29 mayo 2009

TRAGEDIA A OSCURAS

UNA TRAGEDIA A OSCURAS


Ayer se nos fue la luz justo cuando el susodicho ya estaba aplastado en el reposet con el kit futbolero para ver el partido de fútbol de sus dichosos Pumas. De por sí que ya nos habíamos echado un pleito porque a la misma hora era mi telenovela de la malvada Hiena y ya hasta le había dicho que nanai que puro futbol, si ya está en sus últimas semanas mi telenovela ¡pos qué se cree! Pero como la maldición por andar discutiendo ¡zácale! se apagó la televisión y nos quedamos a oscuras.


Cinco, diez, veinte minutos y nada de nada que regresaba la luz y en el inter, el susodicho manoteaba por todos lados como cieguito tanteando que hay al frente. Yo pensé para mis adentros que qué romántico el hombre, seguro andaba buscándome como adolescente calenturiento en la sala oscura del cine, ¡pero qué esperanzas! Este hombre lo que buscaba con desesperación era el control remoto para ganarlo, por que sépanse ustedes que en esta casa la televisión es de todos, pero como en una nación el presidente es el que tiene la última palabra, acá el que tiene el control remoto tiene esa última palabra.


Pero ya se sabe que en la historia de la humanidad desde los cavernícolas los hombres jamás pueden encontrar algo que les quede cerca, que porque dicen que el hombre ve al horizonte porque su escencia es ser cazadores y las mujeres tenemos escencia de recolectoras y por eso encontramos todo y si no me creen manden a su marido a buscar algo a la despensa y verán que no lo encuentran nunca (yo ya hice la prueba 124 veces que mando al susodicho y al hooligan a buscar la catsup y ni teniéndola en sus narices la encuentran). Por eso yo mujer recolectora cavernícola pecho tierra me fui a buscar el control remoto y el susodicho igual, a cazar el control para tener el poder.
Pero esta vez quedamos con el marcador cero a cero por que jamás llega la luz cuando se le necesita caray, ni siquiera para que recuerden estos hombres quien tiene la última palabra ¡pos estos!



1 comentario:

Anónimo dijo...

jajaja, no manches estoy leyendo todo lo que escribes y no sabes como me estoy riendo aquí en la oficina, creo que me ya piensan que estoy loca.
saludos