Primero empezó el hooligan que tiene su amigo clon. Se acuerdan que les había contado que ganas me daban de quedarme afuera de la escuela para fiscalizar al papá del clon, no fuera el diablo y viniera a ser el mismo maquilador ¡pos este!

Y para rematar cada vez que veo la foto de mi suegra, me recuerda que el susodicho es su copia calca ¡qué horror! De ahí que al susodicho lo beso con los ojos cerrados, no vaya a ser que me condene por sentir que estoy besando a mi suegra y pa que quieren! Hasta termino haciendo buches de Listerine.

Yo por lo menos confieso que cuando saco la chancla para regañar al hooligan me clono al Hulk, pero de ahí en fuera parecía que era la única en mi especie hasta ayer, que la de la papelería me preguntó si no era yo hermana de una tal Lourdes, que porque somos muy parecidas ¡Válgame! Yo que pensaba que tenía mi marca registrada y ahora hasta a mí me tocó la piratería!